¡Hola! Bienvenidos al episodio número uno de «El Podcast de a los 40 Autismo». En este episodio se habla sobre qué es el autismo y sus características principales.
¿Qué es el autismo realmente?
El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que se caracteriza por tres pilares fundamentales:
- problemas en la comunicación,
- problemas en la interacción social y
- comportamientos repetitivos o muy restrictivos.
Problemas en la comunicación
Las personas con autismo solemos tener dificultades para comprender y responder de forma correcta en un entorno social, ya que no entendemos el lenguaje no verbal o las normas sociales no escritas.
Y no sólo eso, sino que también solemos tener dificultades para entender los matices del lenguaje, como el tono de voz, el lenguaje corporal y el humor. Sí, las bromas suelen ser un gran handicap social. A mí me ha ocurrido que o no las entiendo, o si las entiendo, las veo tan absurdas que no me hacen ninguna gracia, cuando las personas de mi alrededor se ríen a carcajadas.
El problema es que estas dificultades en la comunicación suelen llevar a malentendidos y frustración. No sólo para mí, sino también para los demás, que muchas veces no entienden mi tono de voz o mi forma directa de decir las cosas.
Otro problema también característico es que puede ser difícil expresar nuestras necesidades y deseos. Esto hace que podamos llegar a tener comportamientos desafiantes o aislamiento social.
Es importante tener en cuenta que cada persona con autismo es única y puede experimentar estos problemas de manera diferente. Algunos pueden tener un vocabulario limitado, mientras que otros, como es mi caso, podemos hablar en un lenguaje muy técnico o repetitivo.
Problemas en las interacciones sociales
Los problemas con las interacciones sociales son una de las características más comunes del autismo. Las personas con autismo a menudo tenemos dificultades para entender las señales sociales no verbales, como el contacto visual, los gestos y las expresiones faciales, lo que puede dificultar la comunicación y la interacción con los demás, como ya he comentado en el apartado anterior.
Tendemos a ser muy directos. Generalmente, esto incumple una norma social no escrita en la que es aconsejable decir las cosas de una manera más edulcorada. Esto puede interpretarse como que tenemos comportamientos inapropiados o incómodos para las situaciones sociales.
Aunque las dificultades sociales son una característica común del autismo, cada persona con autismo es única y puede experimentar diferentes niveles de dificultad en esta área. Algunas personas con autismo pueden tener habilidades sociales excepcionales, mientras que otras pueden tener dificultades más significativas.
Por ejemplo, se suele pensar que los autistas somos tímidos y no nos gusta la gente. Esto no es cierto. Yo soy muy extrovertida y me gusta estar y hablar con gente. El problema es que, como ya he comentado antes, no entiendo muchas reglas sociales no escritas, o bien soy demasiado directa en el mensaje y esto me suele traer problemas en relaciones más estrechas como amistades o relaciones de trabajo.
Comportamientos repetitivos o restrictivos
Los comportamientos repetitivos o restrictivos son otra de las características principales del autismo. Los individuos con autismo a menudo tenemos intereses y rutinas específicas que pueden parecer raras para los demás.
Generalmente son gestos que hacemos de forma repetitiva y que nos ayudan a modular el estrés que sentimos por lo que está ocurriendo en ese momento.
Yo tengo varias, que voy combinando en función del momento. Las más destacadas son las siguientes:
- Movimientos son los dedos de los pies con los que trazo diagonales y paralelas en formas geométricas que busco en mi entorno.
- Movimientos en círculo que hago continuamente con un bolígrafo (de un peso determinado) y que sólo hago si estoy sentada en una mesa.
- Encender y apagar botones de mi cubo sensorial.
- Hacer girar mis anillos.
En otros casos, estos comportamientos repetitivos pueden incluir movimientos estereotipados, como balancearse o agitar las manos.
Además de estos movimientos, están las rutinas o secuencias estrictas. Son muy importantes para nosotros, ya que nos traen paz y nos ayudan a conseguir nuestros objetivos. Quizá desde fuera puedan verse manías, pero es realmente importante para nosotros, de lo contrario podemos tener dificultades para adaptarnos a los cambios en su entorno o rutina diaria.
También podemos ser muy sensibles a ciertos estímulos sensoriales, como la textura de la comida o el ruido del ambiente, lo que puede llevarnos a evitar ciertos alimentos o lugares.
Conclusión
Es importante destacar que el autismo es un espectro, lo que significa que no todos los autistas somos iguales. Cada persona autista tiene una forma única de manifestar estas características, además que podemos tener otras comorbilidades o aspectos que varían en cada caso.
En los últimos años, el autismo se está diagnosticando, cada vez más en la infancia, aunque también hay muchos casos, como el mío, en que nos enteramos de adultos. El diagnóstico puede ser un alivio para muchas personas, ya que les proporciona respuestas a muchas preguntas que han tenido a lo largo de su vida, como te cuento en este episodio.