Saltar al contenido

Cómo gestionar el estrés en eventos cuando eres autista y enfrentas ostracismo

27/04/2025
Eventos estresantes en personas autistas

Introducción

¿Cuántas veces has tenido que ir a un evento, especialmente un evento familiar, y tus niveles de ansiedad se han disparado desde el momento en que sabes que se acerca?

Ya sabemos que la mayoría de los eventos que son fuente de estrés: mucho ruido, interacciones sociales, cambio de rutina, etc…

Pero los hay que generan estrés porque llevan asociados estresores encubiertos. Me refiero a tener que lidiar además con comentarios pasivo-agresivos u ostracismo.

El poco conocimiento del autismo en nuestra sociedad hace que las interacciones sociales tengan un extra de estrés por el comportamiento de las personas que nos rodean. 

Según un informe de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) sobre Acoso Escolar y TEA, las personas autistas tenemos mayor riesgo de sufrir estos estresores emocionales (esta definición es mía) y exclusión emocional. Siguiendo con el informe de la UAM, el maltrato suele ser sutil y relacional: aislamiento, ignorar a la persona autista o manipulación.

Índice

    ¡Sé parte del movimiento hacia un mundo más inclusivo!

    Tu apoyo impulsa este proyecto para visibilizar el autismo adulto y construir un espacio más justo y accesible para todas las personas.

    👉 Descubre cómo puedes colaborar

    Esta incomprensión de nuestras diferencias neurológicas va unida a la diferencia en la percepción de habilidades sociales. Es por esto, que nuestro comportamiento puede ser interpretado como frialdad, arrogancia o rareza (Organización Specialisterne – Estigma social en personas autistas). Qué ocurre, que esto acaba traduciéndose en ostracismo, microagresiones y barreras invisibles para la inclusión.

    Qué es un estresor emocional

    Se trata de un añadido al estrés que vives por el evento y que tiene carácter emocional. Es algo que generan las personas que están durante el evento y que te afectan directamente porque tienen una intencionalidad negativa.

    reunión de personas y estrés en autistas
    Foto de Antenna en Unsplash

    Su actitud hace que te sientas mal, que acabes triste, que aumente el estrés o acabes con un enfado que no traías de casa.

    Por ejemplo: dejarte en mal lugar cuando estás hablando con otra persona, o contradecirte constantemente, o, como hablaremos luego, ignorarte.

    Ahora vamos en detalle a explicar algunos de ellos y cómo puedes protegerte.

    LAS ACTITUDES PASIVO-AGRESIVAS

    Una persona pasivo agresiva es alguien que expresa su malestar de forma indirecta, con comportamientos ambiguos o saboteando. No lo hará de forma directa, incluso aunque le preguntes expresamente.

    Es importante indicar que todos podemos tener esta actitud en algún momento determinado, y que no se trata de un rasgo de personalidad.

    Pero, vamos a detallar algunos comportamientos para que nos quede más claro:

    • Comentarios sarcásticos
    • Excusas
    • Cumplen con sus promesas, pero de mala gana o sin poner cuidado
    • Evidente desgana

    Te pongo algunos ejemplos para que se vea más claro:

    • «Claro, claro, hazlo a tu manera… como siempre.»
    • Olvidar casualmente invitarte o informarte de algo relevante para la familia.
    • Ofrecer ayuda de mala gana para luego recordártelo varias veces (el clásico «yo te ayudé y mira cómo me pagas»).
    • Poner «buenas caras» en público pero luego castigarte con distancia en privado.
    • Hacer bromas que te ridiculizan, pero rematarlas con un «era broma, no seas tan sensible».
    Foto de Christin Hume en Unsplash

    EL OSTRACISMO

    El ostracismo es ignorar a una persona, cuando te hacen sentir como si no estuvieras: obvian tu presencia, tus opiniones…

    Es sutil, pero se siente porque no hay confrontaciones directas, pero tú lo sientes claramente y acabas sintiendo emociones negativas con las que no habías llegado al evento. Te mina la autoestima, debilita tu sensación de pertenencia y tu bienestar emocional.

    Es, en sí misma, una forma de agresión pasiva, que puede ser incluso más dañina que un ataque abierto, porque siempre pueden agarrarse al “no, son cosas tuyas, yo no estoy hacienda nada”. 

    Vamos a ver algunos ejemplos:

    • Ignorar sistemáticamente tus comentarios en una conversación grupal.
    • No incluirte en actividades familiares
    • Responder con monosílabos o indiferencia cuando hablas
    • Hacer planes delante de ti sin invitarte, como si fueras invisible

    Cómo protegernos antes de un evento

    Aunque todavía queda mucho por hacer como sociedad en la inclusión real del Autismo, y a pesar de que los esfuerzos de divulgación que hacemos los creadores de contenidos van haciendo su efecto, debemos reconocer que todavía queda mucho para una verdadera inclusión. 

    Es por esto que las personas en el espectro debemos tomar acción para protegernos. Aquí te voy a dar algunas pautas que pueden ser interesantes.

    Antes de cualquier evento debemos reflexionar sobre qué esperamos de este momento. Y cuando digo antes, no me refiero a media hora antes de la hora de comienzo, sino mucho antes. Días, semanas antes.

    ¡Forma parte del cambio!

    Tu apoyo impulsa este proyecto para visibilizar el autismo adulto y construir un espacio más justo y accesible para todas las personas.

    Apoya el proyecto

    ¿Por qué reflexionar sobre cómo protegernos antes del evento?

    Cuando sea el momento del evento será ya demasiado tarde. Piénsalo, estaremos centrados en todos los detalles que se salen de nuestro rutina y que debemos tener en cuenta, hasta el punto de que acordarnos del protocolo de protección para eventos puede ser misión imposible. 

    En cambio, si lo hacemos días antes, incluso si nos creamos una plantilla, podremos reflexionar sobre lo que estamos dispuestos o no a soportar durante ese momento. 

    Puedes hacer estas reflexiones en tu cuaderno o Bullet Journal. Por cierto, sabes que soy una entusiasta de escribir y reflexionar a mano. Si te interesa, puedes ver mi curso de Bullet Journal que está en abierto en mi canal de YouTube.

    Reunión de amigos y cómo protegerse si eres autista
    Foto de Valiant Made en Unsplash

    PREGUNTAS QUE PUEDES HACERTE ANTES DE UN EVENTO

    Te propongo una serie de preguntas que puedes copiar en tu cuaderno cada vez que tengas un evento y que te ayudarán a predefinir de antemano tu actitud en este.

    Define tu objetivo personal: qué es lo que quieres priorizar en el día del evento.

    Por ejemplo, si es un evento al que no quieres ir, pero no hacerlo sería como comenzar una guerra abierta, puedes plantearte que tu objetivo es proteger tu paz. Es decir, tienes que ir obligatoriamente, pero vas a intentar en la medida de lo posible que no te afecta emocionalmente.

    Te pongo otro ejemplo: es un evento en el que habrá una persona con la que no quieres estar, pero habrá otras personas que sí harán que tu asistencia sea más llevadera. En ese caso, puedes pensar que tu objetivo es disfrutar de los que más me suman.

    Marca tu tiempo máximo

    Vale, tienes que ir, y sabes que no va a ser placentero, por eso establecer un tiempo objetivo te ayudará a sobrellevar esas horas que debes estar allí. 

    Puedes reflexionar sobre las horas que son adecuadas y no te van a acabar afectando más de la cuenta.

    Ejemplo: “si empieza a las 16:00 a las 18:00 me voy”.

    Prepara tu escudo emocional

    Yo le llamo las velitas, porque son objetos (generalmente) que te aportan un poquito de luz en un momento de mucha oscuridad. Te estoy hablando de cosas que sabes que te dan paz, y no tienen por qué ser cosas muy grandes, puede ser tu reloj, una pulsera, una frase en el móvil, tu juguete sensorial, un pañuelo para el cuello… 

    Cuanto antes prepares este protocolo más seguridad tendrás a la hora de enfrentarte a esa reunión social, y además, como lo haces con mucho tiempo, podrás dejarla escrita en tu móvil y así llevarlo siempre contigo. A la hora de la verdad no sumes más estrés a la situación, que sea tan sencillo como leer de nuevo estas directrices y seguirlas.

    Cómo protegerte durante el evento

    Ha llegado el día y seguro que tu sistema nervioso está alerta. Es normal, estás saliendo de la rutina y además para hacer algo que no te apetece nada. 

    Afortunadamente ya cuentas con un protocolo hecho por ti para cuidar tu energía y tu situación emocional que debiste hacer hace unos días. 

    Este blog es gratuito y siempre lo será, porque todo el mundo merece acceso a esta información.

    Pero mantenerlo vivo requiere tiempo, energía y recursos.

    Si te gusta lo que lees y puedes permitírtelo, únete a los miembros del canal de YouTube y apoya este proyecto.

    💛 Gracias por hacerlo posible.

    Vamos con las recomendaciones para este día:

    INTERACCIÓN MÍNIMA Y NEUTRAL

    No se trata de ser desagradable con las personas que están en el evento, aunque más de una vez nos gustaría decir un par de verdades bien dichas. Hacerlo a las bravas solo conseguirá que se refuercen en su idea de que los que estamos incumpliendo las (sus) normas sociales somos nosotros. Por eso lo mejor es ser cortés, pero sin comprometerse ni entrar en provocaciones.

    PAUSAS ESTRATÉGICAS

    Estoy segura de que estar en esa situación hará que estés constantemente en alerta y con los nervios a flor de piel. Para permitir descansos a nuestro sistema nervioso podemos planear pequeñas escapadas: al baño, a la calle, cambiar de habitación si se puede… el caso es salir un poco del estímulo y poder relajarnos. Y sí, puedes revisar el móvil un rato sin problema. Cada vez se ha hecho más habitual, así que vamos a unirnos a la moda.

    ESTABLECE TUS MANTRAS

    Si no estás familiarizado con la jerga de la meditación, un mantra es una frase o palabra que repites constantemente y que tiene una connotación positiva. Hacer esto mejorará tu estado de ánimo. 

    Como no tiene mucho sentido hacerlas en sánscrito, porque no tendrán el mismo efecto sobre nosotros, puedes crear las tuyas propias. Te dejo algunos ejemplos:

    • Soy válido/a
    • Merezco amor y respeto
    • Su actitud dice más de ellos que de mí
    • Elijo no comprometerme con lo que me hace daño

    Tengo que reconocer que durante años pensé que esto no funcionaría mucho, pero hay varios estudios que lo avalan, aunque con peros que te comento luego.

    Foto de Toa Heftiba en Unsplash

    Un estudio de 2016 publicado en Social Cognitive and Affective Neuroscience (Cascio, O’Donnell, Tinney, Falk)encontró que repetir afirmaciones positivas activa áreas del cerebro asociadas con la auto-relacionación y el procesamiento de recompensas, como la corteza prefrontal ventromedial.

    Eso sí, y vamos con los peros que te comentaba antes, deben ser frases realistas, creíbles y alineadas con tus valores reales.

    Qué hacer después del evento

    Ya he hablado de esto en alguna ocasión en el podcast, así que no me explayo mucho. Después de una situación de estrés, como un evento, que además cuenta con estresores emocionales, lo que necesitamos es devolver el estado de equilibrio a nuestro sistema nervioso.

    Lo que nos va a devolver más rápido a este estado es la rutina. Cuanto antes restablezcamos la rutina, antes eliminaremos el estrés. Y es más, cuanto más rígida sea esa rutina, más fácil será llegar a la calma. Si quieres saber más sobre esto, hablo de ello en este episodio del podcast, aunque los eventos que menciono aquí no tienen porqué suponer estresantes.

    💬 ¿Te gusta este contenido? Este blog es gratuito, pero necesita tu apoyo para seguir existiendo. Hazte miembro del canal de YouTube y ayuda a sostenerlo. Gracias ❤️

    Pero también hay otras cosillas que puedes hacer:

    • Reconocer tu esfuerzo: ideal si sigues el método Bullet Journal, como te decía antes, para dedicar un ratito a reflexionar sobre ello.
    • Libérte de cualquier residuo emocional: seguro estarás rumiando unos días, sobre todo si ha sido especialmente estresante, pero una ducha, un paseo al aire libro, o una sesión de meditaciónte irán bien.
    • Concédete un extra: durante años hemos reprimido la satisfacción de nuestras necesidades porque no eran adecuadas, aunque ahora sabemos que sí. Por eso, cada vez que tengas que hacer algo que no quieres o que te ha costado mucho, reconoce activamente ese esfuerzo. ¡Date un premio! Te lo mereces.

    Conclusión

    En resumen, enfrentarse a eventos sociales como persona autista no es solo un reto por los factores externos, como el ruido o las interacciones, sino también por los estresores emocionales sutiles, como los comentarios pasivo-agresivos o el ostracismo. Estos comportamientos, aunque a menudo invisibles para quienes no comprenden el autismo, tienen un impacto profundo en nuestro bienestar emocional. Por eso, es fundamental que tomemos las riendas de nuestra preparación emocional antes de cada evento. Reflexionar con antelación, establecer límites claros y crear un protocolo personal nos permite proteger nuestra paz interior y manejar mejor las situaciones que puedan surgir.

    Es cierto que la sociedad aún tiene mucho que avanzar en cuanto a inclusión y comprensión del autismo, pero mientras tanto, herramientas como las que hemos visto hoy nos permiten cuidar nuestra salud emocional en eventos que, de otro modo, podrían resultar desbordantes. Recordemos que el autocuidado es una prioridad, no un lujo, y que cada esfuerzo que hacemos por mantenernos firmes y cuidar de nuestra salud mental merece ser reconocido.

    Con tu ayuda, podemos lograr más

    Gracias por tomarte el tiempo de leer este artículo. Sé que juntos podemos hacer un cambio real y crear un mundo más inclusivo. Si este contenido te ha tocado, te invito a dar el siguiente paso: apoya mi proyecto y haz que tu contribución sea parte de algo más grande.

    Cada gesto de apoyo, por pequeño que sea, tiene un impacto enorme. Con tu ayuda, podemos seguir visibilizando, educando y creando espacios de inclusión para todos.

    Te animo a visitar la página de apoyo y descubrir cómo puedes sumarte a esta causa que tanto necesitamos.

    ¡Hagámoslo juntos! 🌟
    Configuración